La vida es corta...

 ¿Pero intensa? No. Por lo menos la que nos quieren vender. La de levantarse para acabar en la misma cama, consumiendo horas de una difícil digestión ¿Y por qué en lugar de acabar el día entre las mismas 4 paredes que me encerraban cuando lo empecé, no lo acabo en otro lugar, como por ejemplo, la luna? "Porque no se puede, cateto..." Me dirás. ¿Por qué no?¿Acaso lo has intentado? Seguramente no lo consiga, pero habré logrado además de levantarme, trabajar y volverme a acostar, intentar llegar a la luna. Porque eso son los sueños, situaciones (Generalmente imposibles) que hacen que un día sea más que un día. Y teninedo en cuenta que la vida está formada por un conjunto de días, los sueños hacen que la vida sea más grande de lo que es. Porque, ¿Qué es la vida sin sueños? Lo reconozco, soy un sueñoadicto... Pero como toda adicción, puede matar. Las drogas matan tu vida, el juego mata tu tiempo... Y los sueños matan tus sentimientos. Porque cuando más grandes son tus sueños, más difícil es asumir la imposibilidad de cumplirlos. Es maravilloso ver que me guiñas un ojo, que entiendes cada una de mis ilógicas palabras... Lo que no lo es tanto es que tu perfección no quiera alquilarse mis brazos, ver que la única persona que quieres que te quiera no está por la labor. Y es aquí donde entra el dilema de "la vida es sueño... Y los sueños, sueños son". Y es que me niego a dejar de soñar. Tanta caída no puede ser sana, y aquí no hay hospital que te cure. La única medicina es la comprensión de los amigos, o que tus lágrimas mojen la almohada al acostarte. Pero si tengo algo claro, es que no puedo vivir sin los sueños. La solución pasa por dejarse el alma en intentar cumplirlos. Aunque a ver cómo le explicas a la persona más afortunada del mundo que tu sueño duerme en sus brazos. O cómo le explicas al sueño que emigre de tu pecho, que ya no le quieres ahí, entorpeciendo tu circulación, quitándote la vida. O cómo te explicas a ti mismo, que las mismas plumas que te hacen volar, ver la vida desde otro ángulo, se ven mejor en el buitre que se acabará comiendo tus entrañas. Los sueños, sueños son.